Antes de entrar a casa dejo tras la puerta la humanidad que traigo a cuestas. El tráfico, los ruidos, el olor a drenaje abierto, los moretones en el rostro de una hija malcriada, la mujer que no deja a su marido alcohólico, violento, irresponsable, que la humilla, pero que, cuando quiere, es buena gente; y la depresión interminable del tipo que lo tiene todo y no lo quiere.
Antes de entrar a casa, de todo eso me vacío, porque al abrir la puerta y verte lo único que deseo es llenarme de ti.
3 comentarios:
Es lo utópico del amor querido amigo.
Tu blog como siempre sumamente interesante, lamento no pasarme tan seguido pero prometo hacerlo mas seguido.
Saludos
Que excelente imagen, me ha recordado a las pinturas de Egon Schield.
Me ha gustado mucho tu blog, ¿te molestaría que te agregara a mis sitios favoritos? Un saludo cordial.
D. Silverstone
Que lindos textos, como irse de paseo por el paraiso de los sentidos.
Gracias tambien por ver mi blog y dejar un comentario.
Los comentarios son mi alimento literario.
lumediana
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